Creo que muchos habréis visto circular noticias sobre Momo. Es un ser de aspecto espeluznante que dicen, engancha a tus hijos a una especie de juegos peligrosos donde acaba por autolesionarse.
La realidad es que Momo es una de las leyendas de nuestro tiempo. Es una escultura que se viralizó y con la que empezó a correr el bulo de que era peligroso para los niños.
Lo cierto es que si tienes un hijo muy pequeño, la sola imagen de Momo le dará pavor. Así que mejor no mostrarlo ni investigarlo con él en Internet. Ya el solo hecho de explicarle lo que es puede causarle pesadillas. Y la realidad es que la probabilidades de que se exponga a este contenido es casi imposible, acaso que no sea mayor.
Últimamente también corrió el rumor de que estaban insertando anuncios en YouTube Kids, que me lo recomendáis mucho, de un señor que decía a los niños como autolesionarse. Pero es algo que YouTube desmintió.
Lo cierto es que a quienes pudieran afectar este tipo de juegos son a niños de la edad de mi mayor, a partir de diez. A mi hijo ya le escuché historias que aseguraban que sus compañeros llamaban por teléfono a un número y salían niños gritando, porque era el infierno. Y se ven inclinados a este tipo de cosas.
Yo entiendo que los niños deben ver YouTube aun con los mayores. Aunque he de reconocer que una vez a mí también se me coló unos dibujos no recomendados, porque llevaba auriculares y estaba doblado diciendo palabrotas y expresiones malsonantes. Pero nos pudimos dar cuenta porque las repitió y encontré el origen de estas palabras.
YouTube kids aun lo veo menos seguro que el de adultos, ya que me parece que si alguien está empeñado en dañar a menores, en Youtube Kids lo tendría más fácil porque tendemos a supervisarlo menos y hay menos ojos adultos en cada video que denuncien contenidos peligrosos.
De todos modos, son muchos años ya criando hijos como madre millenial, usuaria empedernida de YouTube, y me veo muchos vídeos con ellos a través de mi televisor convertido en Smart TV. Y jamás en la televisión me ha salido nada, y a excepción de un par de Youtubers un poco payasos y los dibujos doblados diciendo palabrotas, en estos años no me he cruzado con más peligros.
Estoy segura que si a Tilde de dos años, le saliera un anuncio de Momo, correría a mí horrorizada. Y he visto cómo mi hijo ha pasado de gente que le pedía su contraseña de Fornite en Internet porque sabía que era una estafa.
Os dejo por aquí ciertas precauciones con respecto a YouTube que en este tiempo considero interesante:
- Ver YouTube con los adultos presentes. En casa usan auriculares, porque no a todos en casa les gustan los mismo contenidos. Pero permite supervisar lo que ven.
- Crea sus cuentas y usa el control parental. Revisa de tanto en cuanto los contenidos. Que tengan sus propias cuentas les asegura que los anuncios al menos son más o menos de su edad. A mi hija pequeña no le he puesto su propia cuenta y no para de aparecer el anuncio de «Elementor».
- Usa el «Family link» en el móvil. Eso te permite un mayor control de lo que se descargan también, ya que muchos anuncios de niños van enfocados a la descarga de videojuegos. Así puedes controlar y autorizar los contenidos que bajan.
- Yo no creo en la restricción de contenidos. A los niños no les interesan contenidos peligrosos para ellos, por lo general. Con la mera supervisión y hablando en un clima de confianza y respeto, se puede conseguir llevarlos a un buen contenido.
- Estar al día de lo que pasa en Internet, para poder adelantarnos a contenidos perniciosos, estafas y otros peligros. Momo, a día de hoy es más un bulo que un peligro, por lo que no entra en la categoría de cosas de las que hablar.
Vivimos en una época en la historia donde la tecnología nos da unos niveles de bienestar enormes. Por eso creo en enfocar la tecnología de una manera positiva para que nuestros hijos puedan disfrutar de ella, reduciendo sus incovenientes.
A disfrutar de los contenidos a demanda.
