eva blog mama convergente

Si yo con tres puedo hacer tantas cosas…

Mi vida es complicada para la mayoría de mortales. Tres niños, con sendas custodias compartidas para el padre y para mí, un bebé en común de menos de tres años, tres centros escolares, uno de ellos a 25 kilómetros del domicilio familiar, y algún problema derivado de la situación de separaciones, divorcios y demás. Así pinta el panorama familiar en casa y así lo mostramos en redes desde siempre.

Aun así, dentro de lo que podemos estamos trabajando para darles a nuestros hijos lo mejor. Yo estoy agotada por los horarios con bebé, la aun lactancia que mantenemos, la crisis de los dos años. Pero aun así conseguimos optimizar al máximo el tiempo para sacar adelante dos negocios grandes, unos cuantos pequeñitos y abrir próximamente nuevos proyectos.

Seguro que no lo hacemos tan bien como quisiéramos, pero cada día tratamos de hacerlo bien. No nos imponemos la perfección, porque es imposible, pero a base de delegar en el equipo, mucha comunicación entre nosotros y quedarnos con trabajos estratégicos, estamos consiguiendo salir adelante en esta difícil etapa. Pero feliz etapa, porque no perdemos de vista tampoco que la infancia de nuestros hijos es muy corta y que sólo la vamos a vivir una vez.

Yo veo que muchas de las que tienen negocios con niños ya mayores comienzan a hacer cosas cada vez más grande y saliendo más del ordenador de la oficina o de casa. Se atreven con retos más grandes, viajan y tienen empresas mayores.

He visto a amigas vender empresas que crearon con niños bebé por más de medio millón de euros. O vender su empresa especializada en familia e incorporarse en empresas que todo el mundo conoce de oídas con un departamento a su cargo.

Y veo a las que tenemos bebés traspasar etapas. Yo monté el curso rosa trabajando en Airbus Millitary en grafismo, con un bebé de tres años. Me ayudaba la familia, y además no dormía apenas nada. Pero lo conseguí y en su primer año había conseguido más de 1500 alumnos.

Y es cierto que ahora con un bebé de dos años se hace más complicado tirar del carro. Ni os cuento con la locura de agenda de tres niños a tiempo parcial en casa.

Pero a la vez que me ha hace más productiva, me hace disfrutar más de ellos. Yo no tendré más niños, está decidido. Así que esta será mi última etapa con niños pequeños en la vida, al menos mientras no esté rodeada de nietos.

En una conferencia alguien me dijo que con su mujer en casa, mientras emprendían un proyecto se decían: «si esta mujer, con tres niños puede, nosotros también podemos»

Y es que los consejos se quedan cortos. Pero el ejemplo, es la mejor medicina contra los límites que nos autoimponemos.

Comparte este post

eva_gonzalez_3
negocios personales
Eva González Mariscal

¿Hasta cuando vas a esperar?

Esto va totalmente en serio ¿hasta cuando vas a esperar para ponerte en marcha? ¿cuánto llevas ya así? ¿tres, cinco, diez años? Puede que no tengas una vocación definida, o una pasión clara por algo con lo que puedas ganar dinero. Porque la vida es como es y no todas

clienta-del-infierno-decalogo
Foto
Eva González Mariscal

Decálogo de los clientes del infierno

Yo como diseñadora Web, cuando veo a un cliente problemático que pasa de uno a otro y siempre habla mal del anterior, me lo quito de encima. Al final te comprometen personalmente y te genera problemas. No aceptéis clientes así. Seas diseñadora, abogada o psicóloga. Eduquemos. Os advierto que parecen

tablet niños
educación
Eva González Mariscal

NO preguntes a tus hijos sobre “Momo”

Creo que muchos habréis visto circular noticias sobre Momo. Es un ser de aspecto espeluznante que dicen, engancha a tus hijos a una especie de juegos peligrosos donde acaba por autolesionarse. La realidad es que Momo es una de las leyendas de nuestro tiempo. Es una escultura que se viralizó