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¿Y si nada me apasiona?

He querido escribir este artículo porque puede que no encuentres lo que te apasione y estás harto de leer en blog que te dediques a lo que te apasione. Y resulta que incluso Steve Jobs, que dijo que trabajaras en aquello que te apasione, no es que fuera ningún apasionado de la tecnología. De hecho estudiaba algo parecido a humanidades y en resumen era un friki que se paseaba descalzo por clases que le molaban.

Así que si no encuentras lo que te gusta o lo que te gusta no tiene mercado o no te apetece ganar dinero con ello no te preocupes. No es obligatorio que sea tu pasión. Eso sí, tiene que ir en consonancia con tus principios, tus valores, y si no quieres que se convierta en un infierno te debe gustar.

ESENCIA

Está claro que si tu esencia te pide hacer cosas que ayuden a los demás será difícil que trabajes en mercados o con clientes que te causen rechazo. Te voy a decir algo, miles de años de evolución no deben ser para tener un coche, una hipoteca y trabajar ocho horas al día en algo que odias. Hay algo más que te tira hacia lo que quieres hacer.

Llevamos tanto tiempo viviendo con respecto a lo que debemos hacer que nos hemos olvidado de sentir lo que queremos realmente hacer.

LOS MEDIOS

No todo lo que te gusta debes convertirlo en un negocio. Cuando estudiaba piano tenía claro que no quería dedicarme a la música profesionalmente. Sin embargo me fascinaba la música.

Hay personas que les gusta viajar o el deporte. Y no quiere ganarse la vida con ello. Por tanto lo lógico sería tener un trabajo o un negocio que pusiera en práctica cosas que le gustan y les diera la libertad de tener tiempo para sus pasiones, convirtiendo su trabajo en un medio agradable para lograrlo.

TRABAJO MANUAL

En mi país nos educan para adorar el trabajo intelectual, denostando el trabajo manual. En mi generación, la de los treinta y cuarenta años, estaba mejor visto estudiar derecho, medicina o magisterio que convertirse en carpintero. Al punto que hay tanto universitario que ya no está valorado. Pero lo importante es que mucha gente ha dejado de explorar el trabajo manual que quizás les guste. Ni siquiera piensan en dedicarse a ello porque no está tan valorado como lo primero.

Creo que perder el contacto con lo manual nos hace abandonar en buena parte la inspiración. Perdemos la experimentación en lo físico. Perdemos mucho. También podemos aplicar lo anterior y si realizamos un trabajo intelectual, nutrir nuestra experiencia vital de contacto con nuestra capacidad de transformar cosas con las manos, y no sólo como generador de ideas.

HAZ LO QUE SE TE DE BIEN

Según avanzamos en la vida adquirimos habilidades y además tenemos talentos naturales. Hay a quien se le da bien el trabajo ordenado. Quien prefiere el trabajo creativo. Quien prefiere la tierra o quien prefiere lo humano. Hagas lo que hagas, será determinante que te encuentres a gusto y se te de bien. Según disfrutes mejorando te irás nutriendo de la energía creadora que posees. Si eso no sucede, quizás es hora de pensar en hacer otra cosa.

NO LO DUDES

Lánzate a explorar lo que te ha sido negado. Encuentra tu esencia. Alinea tus principios. Experimenta. Siente. Elige vocación o medio, pero dedícate a la tarea más importante: ser feliz.

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